El método Ver, Juzgar y Actuar es una de las herramientas más importantes que se utilizan en el ámbito de la administración. Esta técnica se utiliza para evaluar y tomar decisiones que sean lo más acertadas posible y que aporten al bienestar de la empresa o de la organización en general.
Tal y como su nombre indica, el método Ver, Juzgar y Actuar se divide en tres fases: ver, juzgar y actuar. En la primera fase se realiza un análisis del entorno para detectar los posibles problemas o oportunidades que se puedan presentar. En la segunda fase se evalúa la situación para tomar una decisión acertada. Y en la tercera fase se lleva a cabo la acción adecuada para solventar el problema o aprovechar la oportunidad.
Ejemplo del Método Ver, Juzgar y Actuar
Supongamos que una empresa de telecomunicaciones ha detectado que uno de los productos que ofrece está generando pérdidas. Para solventar este problema se recurre al método Ver, Juzgar y Actuar.
Fase 1: Ver
En esta primera fase se realiza un análisis del entorno para detectar los posibles problemas o oportunidades que se puedan presentar. En este caso, se debe analizar el producto en sí para ver si está obsoleta, si hay nuevas tecnologías que la podrían mejorar, si hay competencia que ofrece productos mejores, etc.
Fase 2: Juzgar
En esta segunda fase se evalúa la situación para tomar una decisión acertada. Se evalúan los resultados obtenidos en la fase anterior y se consideran todas las alternativas posibles para abordar el problema. Por ejemplo, si se opta por mejorar el producto con nuevas tecnologías, se deberá determinar si es más rentable invertir en el desarrollo de una nueva versión del producto o en la actualización de la existente.
Fase 3: Actuar
En esta tercera fase se lleva a cabo la acción adecuada para solventar el problema o aprovechar la oportunidad. En este caso, se deberá decidir si se opta por mejorar el producto o si se opta por sacarlo del mercado. Si se opta por mejorar el producto, se deberán asignar los recursos necesarios para desarrollar la nueva versión. Si se opta por sacar el producto del mercado, se deberá establecer una estrategia para hacerlo de forma adecuada.
Otro Ejemplo del Método Ver, Juzgar y Actuar
Supongamos que una empresa ha detectado una oportunidad de negocio para la cual no tiene los recursos necesarios. Para aprovechar esta oportunidad se recurre al método Ver, Juzgar y Actuar.
Fase 1: Ver
En esta primera fase se realiza un análisis del entorno para detectar los posibles problemas o oportunidades que se puedan presentar. En este caso, se debe analizar la oportunidad de negocio para ver si es viable, si hay recursos para ponerla en marcha, si hay competencia, etc.
Fase 2: Juzgar
En esta segunda fase se evalúa la situación para tomar una decisión acertada. Se evalúan los resultados obtenidos en la fase anterior y se consideran todas las alternativas posibles para abordar el problema. Por ejemplo, se deberá determinar si es más rentable invertir en la puesta en marcha de la nueva oportunidad de negocio o en la adquisición de los recursos necesarios para aprovecharla.
Fase 3: Actuar
En esta tercera fase se lleva a cabo la acción adecuada para solventar el problema o aprovechar la oportunidad. En este caso, se deberá decidir si se opta por invertir en la puesta en marcha de la nueva oportunidad o si se opta por adquirir los recursos necesarios. Si se opta por invertir en la puesta en marcha de la nueva oportunidad, se deberán asignar los recursos necesarios para llevarla a cabo. Si se opta por adquirir los recursos necesarios, se deberá establecer una estrategia para hacerlo de forma adecuada.
Conclusion
Como se ha visto, el método Ver, Juzgar y Actuar es una herramienta muy útil para tomar decisiones acertadas en el ámbito de la administración. Esta técnica se divide en tres fases: ver, juzgar y actuar. En la primera fase se realiza un análisis del entorno para detectar los posibles problemas o oportunidades que se puedan presentar. En la segunda fase se evalúa la situación para tomar una decisión acertada. Y en la tercera fase se lleva a cabo la acción adecuada para solventar el problema o aprovechar la oportunidad.
En este artículo se han mostrado dos ejemplos de cómo se puede aplicar el método Ver, Juzgar y Actuar. El primero consistía en solucionar un problema relacionado con un producto en el que se estaba generando pérdidas. El segundo consistía en aprovechar una oportunidad de negocio para la cual no se tenían los recursos necesarios.
En definitiva, el método Ver, Juzgar y Actuar es una herramienta muy útil para tomar decisiones acertadas en el ámbito de la administración. Se trata de una técnica sencilla que se divide en tres fases para poder evaluar una situación y tomar la mejor decisión posible.
