¿Cómo podemos identificar si una pregunta es abierta o cerrada? Esta pregunta es la clave para entender el concepto de preguntas abiertas y cerradas, ya que las preguntas abiertas permiten al entrevistador obtener información detallada sobre el tema, mientras que las preguntas cerradas limitan la respuesta del entrevistado a una o pocas opciones. A continuación, explicamos estos conceptos con algunos ejemplos para ayudarte a comprenderlos mejor.
¿Qué son las preguntas abiertas?
Las preguntas abiertas son aquellas en las que el entrevistador no limita la respuesta del entrevistado. Estas preguntas permiten al entrevistado expresar sus opiniones, sentimientos y experiencias con mayor libertad. Esto permite al entrevistador obtener una respuesta más detallada y completa. Algunos ejemplos de preguntas abiertas son:
- ¿Qué cambiarías de tu vida si tuvieras la oportunidad?
- ¿Cómo es tu día a día?
- ¿Por qué consideras que es importante fomentar la educación continua?
- ¿Cómo te ves en 5 años?
¿Qué son las preguntas cerradas?
Las preguntas cerradas son aquellas en las que el entrevistador limita la respuesta del entrevistado a una o pocas opciones. Estas preguntas permiten al entrevistador obtener una respuesta concisa y directa. Algunos ejemplos de preguntas cerradas son:
- ¿Estás satisfecho con tu trabajo actual? (Sí/No)
- ¿Cuál de estas ofertas encuentras más atractiva? (A/B/C)
- ¿Cuál es tu nivel de competencia en inglés? (Básico/Intermedio/Avanzado)
- ¿Cuál es tu opinión sobre la educación en línea? (Muy favorable/Favorable/Neutral/Desfavorable/Muy desfavorable)
Como puedes ver, las preguntas abiertas permiten al entrevistador obtener información más detallada y completa, mientras que las preguntas cerradas permiten al entrevistador obtener una respuesta más concisa y directa. Ambos tipos de preguntas tienen sus usos y ventajas, por lo que es importante entenderlas y saber cuándo usar cada una.