La sociedad por acciones simplificada (SAS) es una forma de organización empresarial que se utiliza en México para crear empresas de propiedad de uno o varios accionistas. Está regulada por el Reglamento de Sociedades por Acciones Simplificadas, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 28 de marzo de 2019.
Las empresas mexicanas SAS están sujetas a la Ley General de Sociedades Mercantiles y al Reglamento de Sociedades por Acciones Simplificadas. Están diseñadas para facilitar la creación de pequeñas y medianas empresas, ya que tienen requisitos más flexibles que otras formas de organización empresarial más formales.
Las empresas SAS se caracterizan por tener una estructura simple, con pocos accionistas, lo que significa que los accionistas tienen una mayor responsabilidad en la gestión de la empresa, lo que les permite obtener un mayor control sobre sus inversiones. Además, las empresas SAS tienen menos requisitos de capital que otras formas de organización, lo que les permite a los accionistas ahorrar costos.
Ejemplos De Empresas Mexicanas SAS
1. Servicios de Ingeniería y Construcción S.A. de C.V.
Servicios de Ingeniería y Construcción S.A. de C.V. (SEC) es una empresa mexicana SAS con sede en la Ciudad de México. La empresa ofrece servicios de construcción, ingeniería y diseño de proyectos de construcción. Ha trabajado en proyectos de construcción de grandes proyectos de infraestructura en todo México, como el Metro de la Ciudad de México, la Autopista México-Toluca y la Torre Latinoamericana.
2. Grupo Lala S.A. de C.V.
Grupo Lala S.A. de C.V. (Lala) es una empresa mexicana SAS con sede en Toluca, Estado de México. La empresa se dedica a la producción y comercialización de lácteos y productos lácteos. Es uno de los principales productores de lácteos en México, con productos como leche, queso, yogur y mantequilla. Lala también se especializa en la producción de productos lácteos para la industria alimentaria y bebidas.
Ambas empresas ejemplifican el uso de la Sociedad por Acciones Simplificada en México para la creación de empresas. Estas empresas han demostrado que la SAS es una forma efectiva de organización empresarial que permite a los accionistas obtener un mayor control sobre sus inversiones. Al mismo tiempo, la SAS ofrece una mayor flexibilidad en cuanto a los requisitos de capital, lo que permite a los accionistas ahorrar costos.